viernes, 31 de julio de 2020

De cerca: Julio Camba.



- No ha podido vivir la reciente permanencia del Club Deportivo Lugo como jugador, pero seguro que este joven central se alegra mucho de lo que ha conseguido el equipo de su ciudad, con el que un día pudo debutar en Segunda División.
Últimamente ha competido en la Tercera División con el Viveiro, después de haber jugado en Segunda B con el Somozas y haber formado parte de otro modesto de Galicia como el Racing Vilalbés.

Producto de la cantera del Lugo, Julio José Camba Chao fue una de las grandes promesas de nuestro fútbol que desde joven llamó mucho la atención. Este zaguero de 24 años nació el 6 de junio de 1996 en Vilalba (Lugo).

En su ciudad natal comienza a jugar al fútbol. Desde niño comenzaría a formar parte de la cantera de la entidad de Anxo Carro, pasando por algunas de sus secciones hasta llegar al equipo filial directo, el Polvorín.
Pronto se le vieron condiciones de gran futbolista, un defensor agresivo y contundente, corpulento e inteligente que aprovecha su casta galaica para frenar a sus rivales. Ya en sus inicios, Julio se perfiló como uno de los firmes candidatos para debutar con el primer equipo lucense.

Tuvo sus primeras opciones con tan solo dieciséis años, disputando diversos amistosos, como aquel en un partido benéfico frente a un combinado de la Cruz Roja, un compromiso del que el vilalbés guarda un grato recuerdo.

Pero pronto llegarían sus primeras oportunidades para estrenarse de forma oficial. Después de figurar como líder de equipo en el Lugo juvenil y su filial directo, Camba sería convocado para afrontar un choque liguero del curso 2012/2013 ante el Sabadell en la Nova Creu Alta. Volvería a ser citado para otro compromiso frente al Mirandés en Anduva, aunque finalmente no habría minutos para el joven canterano de apenas diecisiete años.

Tampoco habría que esperar tanto para ver debutar a Julio Camba con su querido Lugo. Sería en el curso siguiente, el 9 de noviembre de 2014. Al técnico Quique Setién no le temblaría mucho el pulso a la hora de colocar como titular al canterano, que ante la visita del Sabadell formaría en defensa con Iago, De Coz y Borja Gómez.
Aquel joven debutante supo demostrar que la Segunda no le quedaría tan grande. A Camba se le vio cómodo en un partido que finalizaría con victoria lucense por 2-1 gracias a los tantos de Iago Díaz y el veterano David Aganzo. Aquel día sería inolvidable para el vilalbés, que fue valorado positivamente en su brillante estreno.

Sin embargo no habrían más oportunidades para Camba, que ante la falta de minutos se marcharía cedido al Somozas para completar la campaña 2015\16. Por desgracia, Julio no contaría con la confianza de Stili y no jugaría partido alguno.

Retornó a su club de origen para seguir siendo un líder en la zaga del Polvorín y así buscar otras oportunidades con el primer equipo. A veces el fútbol es así de injusto, ya que el defensor no volvería a representar al equipo de su tierra en Segunda División, una categoría en la que el Lugo sabe sobrevivir.

Julio Camba llegaría a debutar en Segunda División con el Club Deportivo Lugo.

- Decepcionado por esa escasez de oportunidades, Julio Camba se buscaría la vida en otros clubes más modestos, así que ya no volvería a competir ni en la división de plata ni la de bronce. El joven aceptaría el reto de jugar en Tercera con el Viveiro, donde estaría un año para después volver a casa y así jugar en el Racing Vilalbés.

Camba ha retornado al Viveiro C.F., donde trata de empezar de cero sin olvidar que un día debutó con el primer equipo del Lugo, el que recientemente halló la salvación en la categoría de plata, la que Julio llegó a conocer con solo diecisiete años.

miércoles, 29 de julio de 2020

Lío en el fútbol gallego con el Coronavirus.



- Alegría y tristeza o alivio y frustración. Ese sería el resumen de una temporada 2019\20 que pasará a la historia por haber sido interrumpida a causa del Coronavirus. Aún no se puede dar por finalizada debido a la polémica surgida con la no celebración del Deportivo-Fuenlabrada, lo que ha causado que el cierre de la Segunda División española permanezca en el aire.

Pero hasta la fecha podemos contar que el Celta -por los pelos- es de Primera, que el Lugo sigue en Segunda y el "Compos" ascendió a Segunda B. Otros clubes gallegos continúan a la espera de la celebración del siguiente campeonato, mientras el futuro del C.D. Lugo y Deportivo de La Coruña sigue en la incertidumbre, hasta que la LFP y Tebas decidan dar sentencia.
Los equipos que ya pueden disfrutar de un corto periodo vacacional son Celta y Compostela, ya con sus deberes hechos. El Ourense se quedará planificando otra intentona para subir a la categoría de bronce y el Pontevedra... En fin, esperemos verle pronto en Segunda.

Javier Tebas (presidente de la LFP).
- Pero el gran lío está en A Coruña y en Madrid, algo que ya se ha extendido por toda España como lo hizo el brote de la Covid-19. Ambos clubes son noticia día a día, pues aún no se conoce la decisión de los que mandan en el fútbol, la que podría perjudicar o beneficiar a los dos clubes que tenemos en la categoría de plata.
El Dépor es casi seguro que ya no pueda contar para el año que viene, pues tras descender en la inconclusa temporada, es probable que no cuente con el apoyo de los grandes organizadores de las competiciones en España. Javier Tebas se niega a dar la razón al deportivismo, y eso hace que los simpatizantes del Lugo tengan un halo de esperanza tras ganarse merecidamente su permanencia en la categoría de plata.
La polémica empieza el 20 de julio de 2020, en un ajetreado lunes en el que se debería haber terminado el curso en Segunda División en horario unificado. No fue así, ya que el Deportivo-Fuenlabrada no se llegaría a completar debido a que varios jugadores del modesto equipo madrileño fueron recluidos en un hotel coruñés por una posible infección del virus en cuestión.

Eran las 21:00 horas de la noche de aquel tenso lunes estival y los directivos del Deportivo aceptarían la propuesta de aplazar la jornada... el resto de los partidos se celebrarían igualmente. En principio, esta situación hubiera sido ventajosa para el club coruñés, pues solo debería aguardar el pinchazo de Lugo, Albacete y Numancia para hallar, a posteriori, su salvación.
Pero finalmente no se produjo la situación ventajosa, y sus tres competidores acabarían haciendo sus deberes. Lucenses y manchegos celebrarían su permanencia, y al Dépor no le quedaría nada que rascar. Una victoria le haría de Segunda B igualmente.

La directiva herculina, compuesta por Fernando Vidal a la cabeza, no aceptó de ningún modo conformarse con aquel triste final que dejaba al club de Riazor en la división de bronce. A partir de ahí se monta el lío.

Javier Tebas (presidente de la LFP) y Luis Rubiales (presidente de la RFEF), tienen el futuro de nuestros equipos gallegos en el aire. Aunque parezca que la sentencia parezca firme con la decisión de no terminar el partido entre Deportivo y Fuenlabrada, los dirigentes gallegos no se dan por vencidos.
Desde A Coruña llegan varias propuestas: ampliar la Segunda División a 24 equipos, repetir la jornada por completo o conseguir alguna forma de mantenerse en la categoría. Se podría dar el hecho de que le diesen los tres puntos al conjunto gallego y esperar a que se decida algo en cuanto al partido que se disputó frente al Extremadura y en el que los coruñeses aseguran que su rival compitió con alineación indebida. Para el último caso habrá que esperar la sentencia del TAD (Tribunal Administrativo del Deporte).

Los dirigentes deportivistas saben que esos seis puntos les salvaría, así como también creen en el descenso administrativo del Fuenlabrada por negligencia al protocolo del Coronavirus, algo que no sería justo.

Son muchos los expertos que tratan de analizar la situación, y muchos coinciden en que no sería positivo aumentar los participantes de la división de plata. La LFP ya comienza a dar avisos sobre la conclusión del campeonato sin celebrar el duelo pendiente entre gallegos y madrileños, y eso rompería todos los esquemas de la empresa de Riazor. Ahora les tocará explotar otras vías para eludir el descenso, algo que sería hecatómbico para el histórico club blanquiazul.

Deportivo y Lugo aguardan una decisión de la LFP y RFEF para continuar en Segunda División.

- Al margen de todo esto, a la espera está el Elche de certificar su pase a los play-offs que le dan derecho a competir por el pase a Primera, ya que el "Fuenla" podría optar en caso de jugarse el partido y ganar, pero la celebración del encuentro está casi descartada. El ascenso y permanencia de la Segunda División está aún en el aire.

El 2020 ha sido un año muy duro para casi todos los clubes gallegos, y mucho tiene de protagonismo el Coronavirus. El Celta de Vigo sigue sintiéndose de Primera tras un agónico final. El Deportivo y Lugo aguardan la decisión final de una categoría de plata sin acabar... Ambos quieren seguir en Segunda, pero es muy probable que lo hagan al mismo tiempo. Lo que está claro es que el club de Anxo Carro lo merece más por méritos deportivos.

La parte más positiva la viven los compostelanos, ya que su equipo ha subido a Segunda B, mientras que sus hermanos de Ourense tendrán que esperar. Por lo demás, nada más que señalar, solamente que ese virus mortal desaparezca para siempre por el bien de la humanidad. De momento, y en a lo que el fútbol respecta, la polémica está servida.

sábado, 25 de julio de 2020

¿Te acuerdas de Rubén González?



- Hoy es un gran día para todos los gallegos. Es el día de nuestra Galiza, el día de Santiago Apóstol, un día muy especial para todos los que amamos nuestra tierra. ¿Quién mejor que un futbolista nacido en Santiago de Compostela para celebrarlo?.
Y allí, en la bella capital gallega nació Rubén González Rocha el 29 de enero de 1982. Además de haber llegado a representar a nuestra selección galega, este defensa central llegó a jugar para equipos como el Celta, Osasuna y Real Madrid, entre muchos otros. Incluso se atrevió a jugar en el extranjero conociendo las ligas de Alemania, Azerbaiyán y la India.

Su carrera terminó no hace mucho, habiendo formado parte de una generación que daría paso a grandes futbolistas de nuestra tierra. Rubén es el claro ejemplo del buen fútbol que ha emergido de Galicia en las últimas décadas.

Rubén González como jugador del Real Madrid.
- Llegó al Celta con la ilusión de cumplir su sueño de jugar en un equipo de su tierra, con el proyecto de un Celta con una plantilla de puro acento gallego y el ascenso a Primera División por bandera. Pero el final de su historia en el Celta fue muy diferente al que todos esperaban, pues pasó de héroe a villano en muy poco tiempo.
Como jugador, Rubén era un defensa central forjado en la cantera del Real Madrid, aunque sus primeros pasos los dio en el histórico equipo compostelano del Conxo, pasando después a formar parte de las categorías inferiores de la S.D. Compostela con gran proyección y , en principio, con un futuro prometedor. Se defendía bien por alto y sabía imponerse en defensa gracias a su corpulencia. Tras destacar en el fútbol gallego, jugó para el Castilla teniendo la ocasión de jugar con el primer equipo en cuatro ocasiones durante tres temporadas. Quizás esos fueron sus mejores años como deportista.

Tras la falta de oportunidades con el Real Madrid decidió buscar sitio en otro equipo de mayor nivel que el filial merengue, así que el club del Bernabeu lo cedió al Borussia Mönchengladbach, donde jugaría una temporada en la Bundesliga jugando sólo tres partidos en toda la liga germana. Aún así, Rubén puede presumir de haber ganado la Champions League del 2002 en su etapa como madridista, ya que participó en algún partido de las primeras rondas con el Real Madrid.

El santiagués abandonaría Alemania para regresar a España y así ser cedido de nuevo a otro equipo. Esta vez jugaría una temporada con el Albacete Balompié, y con los manchegos jugaría 22 partidos rindiendo a un mejor nivel en Primera División, la cual abandonaría el conjunto albaceteño tras ocupar los puestos de descenso a la categoría de plata.

Rubén González también se vería en la misma división que el Albacete, ya que regresó al Castilla. Al final de la temporada 2005\2006 terminaría su vinculación con el Real Madrid y firmaría por el Racing de Santander para jugar de nuevo en la máxima categoría. En Santander encontraría la continuidad y se haría con la titularidad llegando a jugar 34 partidos de liga. Con el Racing acabaría décimo en la tabla clasificatoria y marcaría sus primeros goles en primera que fueron dos, ante el Mallorca y Villarreal y de forma consecutiva.

Al finalizar el campeonato 2006\2007, Rubén González recibiría una suculenta oferta para jugar en la liga turca, pero le convenció más el "proyecto casero" del Celta y decidió regresar a Galicia para jugar con el equipo vigués.

Sus inicios fueron ilusionantes, metiéndose en el bolsillo a la afición viguesa y jugando a un buen nivel sus primeros partidos, aunque su rendimiento fue decayendo paulatinamente y acabó siendo muy discutida su actuación en el conjunto celtiña.
Su primer partido se produjo en la primera jornada de la liga 2007\2008, frente al Córdoba en casa y con empate a uno final. Esa misma temporada materializó su primer tanto como celeste, fue en la jornada decimocuarta de liga ante el Gimnàstic de Tarragona, en un partido que finalizó también con empate a un gol. Esa misma temporada llegó a jugar 37 partidos, aunque el ambicioso proyecto de ascender a Primera se fue al garete ya desde el invierno.

Con el técnico Pepe Murcia contra las cuerdas y un Rubén más que cuestionado por su bajo rendimiento, la siguiente temporada fue aún peor, la afición cada vez criticaba más sus actitudes y aptitudes dentro del campo, además de tener asuntos extradeportivos que le llevaron a ser repudiado por la gente de Balaídos.

Rubén González saldría del Celta para jugar en diversos clubes y en diferentes ligas.

- En su última temporada jugó 33 partidos sin marcar goles y el capitán celeste no demostró interés alguno en el futuro del Celta, y eso le llevó a ser apartado incluso del equipo. En el verano de 2009 ficharía por el Real Mallorca, con el que volvería a jugar en la categoría de oro española.
Después pasaría por Osasuna, teniendo un ajetreado final de carrera jugando en Azerbaiyán y la Imdia para equipos como el FK Baku y Delhi Dynamos. Entre medias jugaría para el Real Zaragoza, participante de la Segunda División.

Su trayectoria deportiva acabaría en Vigo, aunque esta vez para militar en el modesto Coruxo, con el que daría sus últimos pasos como futbolista. Rubén González se retiró en 2017 dejando una experiencia de 118 partidos y 5 goles en Primera División.


¡FELIZ DÍA DA GALIZA A TODOS!

De cerca: Facundo Pellistri.

- Tuvimos la ocasión de verle en la Liga Española hasta hace muy poco, jugando para un Deportivo Alavés que descendió al final de la campaña...