¿Te acuerdas de Jesús Ares?

- Ares fue uno de esos jugadores que pasó de triunfar en un equipo pequeño a fracasar en un equipo de mayor nivel, como sigue pasando en el fútbol de hoy en día. Al igual que Artime, Jesús Ares Otero militaba en el Racing de Ferrol antes de llegar juntos al Real Club Celta de Vigo a mediados del mes de Marzo de 1954.

Este defensor nació el 20 de noviembre de 1933 en Foz (Lugo). Además de su paso por Racing de Ferrol, Celta y Atlético, también jugó para equipos como la S.G. Lucense, Málaga, Salamanca y Langreo.
Su debut con la zamarra celeste no tardó en hacerse realidad, aunque no fue el mejor día para debutar, ya que el Celta salió goleado por 5-2 de Mestalla. Ares y Villar eran los encargados de solidificar un medio del campo que contaba de aquella con cinco hombres de ataque por delante, típico de aquella época.

- Tras aquella goleada de principios de abril, en la que el lucense se estrenaba como celtiña, no volvió a tener oportunidades en toda la temporada. Además, tampoco era fácil encontrar sitio en un equipo con 37 jugadores en plantilla. La competencia era dura.
Al año siguiente hubo que reducir la plantilla, y para ello el Celta optó por liberar a los siguientes jugadores: Simón, Marzá, Vilariño, Olavide, Juanito, Mekerle, Bello Amigo, Tolín y Aretio, aparte de declarar transferibles a Sansón, Mascaró, Suárez y Larrosa.
Jesús Ares fue de los jugadores que tuvieron la fortuna de seguir defendiendo la camiseta celeste, y el tiempo le acabó dando la razón. Aunque su eclosión no llegó hasta la campaña 1956\57, cuando el Celta lo dirigía desde el banquillo el argentino Alejandro Scopelli. Mientras tanto, Ares pasó dos temporadas a la sombra de sus compañeros, jugando un total de 7 partidos entre las dos, exactamente 630 minutos.
Y al fin llega el año de Ares, y es que con la llegada del argentino , el "Che" Gutiérrez, su participación fue ganando enteros con el paso de las jornadas. Es más, el medio gallego llegó a disputar un total de 28 partidos en el ejercicio 56\57.

En esa misma temporada , también logró hacer sus dos primeros goles como celtiña. El primero lo hizo ante el Deportivo de La Coruña en Riazor, en un partido en el que el Celta fue dueño y señor en todo momento, ganando el partido por 0-3.

Su segundo y último gol como céltico lo logró en Balaídos frente a la Real Sociedad, aunque esta vez no les sirvió para mucho a los de Scopelli, puesto que el conjunto donostiarra se llevó los dos puntos de Vigo al vencer por 2-3 en un disputadísimo encuentro.
Ares formaba una gran conexión con Pepe Villar y Gutiérrez, sobre todo con el primero, que fue con quien tuvo que defender el medio del campo celeste durante toda la liga, una liga que casi acaba con el Celta en Segunda División.

Sin ser consciente de ello, Ares había jugado su último partido con el club vigués en aquella contundente derrota del santiago Bernabeu, (4-1), en la última jornada de liga. Una vez finalizada la temporada, y antes de iniciarse la primera eliminatoria de la Copa del Rey, Vigo recibe la ingrata sorpresa del traspaso del centrocampista gallego al Atlético de Madrid.

La entidad madrileña llegó a pagar 1.250.000 pesetas por el jugador, una gran operación que el respetable no entendió hasta conocer definitivamente la cuantía del traspaso. Hasta conocerse los detalles de la operación, la ciudad estaba indignada por el incumplimiento del presidente céltico Manuel Prieto, quien había asegurado que no se desharía de ningún jugador, pero ese dinero vino muy bien para subsanar gran parte de la deuda del club.

Ares pasaría a un club de mayor nivel percibiendo una gran cantidad mensual, mientras que el Real club Celta reforzaba su hueco con la llegada Antonio Martínez Fernández  "Toni". El Celta desembolsó 250.000 pesetas para pagar la llegada del medio ovetense.

La última campaña de Jesús Ares con el Celta fue la más completa del focense.

- Ares dejaba a sus espaldas cuatro años en Vigo, de los cuales, sólo uno de ellos se puede caracterizar como bueno, el último. En total completó 37 partidos y materializó dos tantos, un buen balance teniendo en cuenta que el medio lucense no era uno de esos cinco hombres que componían esas delanteras de antaño.

Pero en el club de Manzanares no le fue tan bien como en el Celta, ya que sólo fue alineado en séis ocasiones, no marcó ningún gol y tampoco llegó a finalizar su contrato con los colchoneros. Tras su fracaso en el Atlético de Madrid, Ares fichó por el Málaga, equipo de la Segunda División española.
El de Foz nunca más volvería a jugar en la categoría máxima, pasando por equipos como el Salamanca y Langreo, hasta que con 32 años decidió colgar las botas para siempre.