De cerca: Borja Yebra.

- Nunca llegó a concursar en Primera División, y ni siquiera pudo hacerlo en Segunda. Toda su carrera se ha desarrollado en la categoría de bronce, en la que ha probado en sus distintos grupos con los diferentes clubes por los que ha pasado.
Lo suyo es de récord, ya que este veterano futbolista lucense se acerca a los cuatrocientos partidos en la Segunda B, algo que nadie ha podido contar. Tan extensa es su carrera, que en hasta ahora ha visto desaparecer tres equipos en los que ha jugado.

No es fácil la vida de un jugador del fútbol modesto. No llegan los medios económicos, muchos viajes, muchas concentraciones y fútbol del estilo más duro. Sin embargo es algo sin lo que Borja Yebra González no sabría vivir.

Este centrocampista organizador nació en Chantada (Lugo), el 4 de julio de 1983. Su padre le inyectó el fútbol en sangre, pues José Yebra jugó para equipos como Arenteiro, Club Lemos y Chantada. La cantera fue siempre una de las más prolíficas del fútbol lucense, y de ahí sale nuestro protagonista Borja.
Dio sus primeros pasos en el campo del poblado de Fenosa, en Belesar. Labró sus inicios en la cantera del Real Madrid, pero de allí se mudó al Pabellón, de donde pasaría posteriormente al Calasancio.

A punto estuvo de dejar el fútbol porque no le iba bien, pero el refuerzo familiar originó que Borja siguiese compitiendo hasta llegar a la categoría de bronce española. Tras su negativo paso por el Calasancio, ingresaría en 2004 en las filas del Ponte Ourense.

Yebra se marcharía al Club Deportivo Ourense con el que jugaría por vez primera en Segunda B el 23 de octubre de 2004. El joven mediocampista tendría sus primeros minutos a las órdenes de Milo Abelleira ante el Mallorca B, en una visita orensana que acabaría con empate a cero.
En su primer año con el club de As Burgas solamente tendría dos apariciones más, algo que iría cambiando progresivamente. A partir del curso 2006\07, el chantadino contaría con la confianza de Manuel Tomé para sumar un total de 33 partidos.

También haría sus primeros goles ese mismo año, siendo el primero de ellos en la segunda jornada del campeonato ante el Pájara-Playas y el segundo frente al Gimnástica de Torrelavega. Borja Yebra ya se estaba asentando en una categoría en la que jugaría infinitos partidos.

Se ha acostumbrado a jugar en el fútbol modesto nacional. Tras cuatro temporadas en el Ourense, el centrocampista seguiría jugando en Segunda B pese a que el equipo había descendido a Tercera. En 2008 fichó por Universidad de Las Palmas.
Para el conjunto canario solamente jugó una temporada (2008\09), ya que abandonaría el extinto club para jugar en otra malograda empresa, el Atlético Ciudad, del que regresaría a la entidad orensana, que había retornado a la categoría de bronce en poco tiempo.

Durante dos años más jugaría para la escuadra de O Couto, con la que sumaría más registros hasta abandonarla poco antes de su desaparición. Alcanzando su etapa veterana, Yebra se trasladaría a tierras manchegas para fichar por el Guadalajara, en cuyo equipo jugaría a lo largo de la campaña 2014\15.

Si continúa en activo, Borja Yebra podría alcanzar la cifra de 400 partidos en Segunda B.

- Continuó con aquella excursión lejos de Galicia jugando para el Marbella Fútbol Club, con el que cumplió sin problemas antes de retornar a su tierra y así fichar por el Boiro, en el que tuvo también un papel destacado.

En 2017 se marchó a Vigo para incorporarse al modesto Coruxo. En este equipo cumple con su tercera temporada, la que terminará cumpliendo los 37 años de edad. Con el conjunto olívico ha cumplido los 370 partidos en la Segunda División B. Borja Yebra es el jugador con más partidos en la categoría de bronce.