De cerca: Adrián Quintairos.

- En su día fue uno de los futbolistas gallegos más prometedores, producto de la cantera del Real Madrid hasta que recaló en las filas del R.C. Celta de Vigo. A punto estuvo de tener opciones con el primer equipo, aunque finalmente no llegaría a contar ni para amistosos.
Entonces pasaría por varios clubes, la mayoría de ellos de la zona de Galicia. Además de jugar para Ourense y Fuenlabrada, este delantero orensano vistió la camiseta de equipos como el Órdenes, Negreira y Boiro, entre otros.

Adrián Quintairos Bugallo nació en Celanova (Ourense), el 15 de marzo de 1983. A pesar de tener 36 años, el atacante se resiste a dejar un deporte que vive como nadie. Actualmente se halla en el Club de Fútbol Noia.

Le he visto jugar en el campo Municipal de Barreiro (Vigo) en diversas ocasiones. Es un delantero correoso, bregador como ninguno aunque con poco gol. Esto se debe a que es más bien un atacante posicional, uno de esos puntas que sabe asociarse bien a sus compañeros para crear peligro en el área rival.
Dio sus primeros pasos en el equipo de su localidad natal. Del fútbol base del Celanova se hacía cargo su padre, quien vio como su hijo empezaría a competir a partir de los seis años. Adrián no tardaría en mostrar muy buenas maneras.

Se incorporó al Pabellón en categoría infantil y conquistaría con éxito el torneo de Liga, lo que originó que los ojeadores del Real Madrid le invitasen a trasladarse a la capital para seguir formándose en el club blanco.

Hasta ocho años permaneció en la cantera de la entidad madridista, marchándose de Madrid a los veintidós años y habiendo hecho ya sus primeros goles en la Segunda División B española, en la que debutó un 31 de agosto de 2003 en una victoria ante el San Sebastián de los Reyes (1-2).

Entonces se incorporaría a la disciplina del Real Club Celta de Vigo en su regreso a Galicia. En el filial celtiña se pondría a las órdenes de Rafa Sáez, quien le permitiría seguir compitiendo en la categoría de bronce española. En su primer año con el Celta B, Quintairos hizo 5 goles en 19 partidos.
En el equipo vigués coincidió con canteranos que hoy en día destacan en Primera División: Sergio Álvarez, Iago Aspas, Yoel Rodríguez y Dani Abalo, entre otros. Fue la generación de oro del club celeste, de cuya cantera fueron saliendo grandes talentos del fútbol español.

Ya en su siguiente año mejoró en sus registros. El de Celanova jugaría casi todos los partidos del curso 2006\07, llegando a marcar ocho goles con muy buenas actuaciones sobre el verde que casi le llevan a debutar con el primer equipo.

En sus dos años de estancia por Vigo, el jugador viviría un trágico accidente de carretera que costó la vida de dos amigos suyos. Por fortuna, el delantero orensano sobreviviría a aquel lamentable contratiempo, continuando con su carrera deportiva tras dos buenos años en el Celta de Vigo.
Entonces retornaría a Madrid, aunque esta vez para jugar en el Fuenlabrada. Con este equipo viviría el descenso a Tercera, donde competiría varios años hasta fichar por el Ourense, con el que jugó en Segunda B por última vez.

A sus 36 años, Adrián Quintairos sigue jugando para el Club de Fútbol Noia.

- Tras jugar para el equipo de su ciudad, Adrián Quintairos iniciaría un largo peregrinaje por diferentes clubes del fútbol modesto. Del Ourense pasaría al Órdenes, del que se iría para recalar en otros equipos como el Boiro, Negreira, L'Entregu C.F. Del conjunto asturiano retornaría al Negreira, y ya en 2018 ficharía por el Noia.

A sus 36 años, el eterno Quintairos sigue jugando al fútbol con el equipo coruñés. No tuvo la suerte de conocer las categorías más altas del fútbol español, aunque el de Celanova puede presumir de haber formado parte de clubes como Real Madrid y Celta.